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miércoles, 1 de mayo de 2013

Dejar sin aliento

Comienza con besar
es como la puerta del asunto
los latidos se aceleran
se agita la respiración.
Se procede a levantar, 
conjuntamente con saltar;
una vez que se salta,
a la cama, (puede ser sustituida por un sillón, o el piso)
se empuja;
es importante controlar la fuerza,
debe ser una cadena de acciones firmes pero a la vez dulces.
Finalmente: nadar.
Fuera del agua y en conjunto con otro, 
juntando almas,
cediendo al deseo;
debe ser un nado sincronizado
al mismo ritmo,
sin adelantarse ni atrasarse
para con delicadeza
llegar a la meta, 
dejar sin aliento.